Son ante todo un símbolo que representa el infinito, aunque también se pueden emplear como amuletos mágicos. Los nudos célticos no tienen ni principio ni fin y poseen ciertas regularidades que se repiten permanentemente y que en la cultura celta representan el curso natural de la vida, del mundo y del cosmos.
Ciertamente, el nudo céltico más conocido es el que aparece en la popular serie de televisión Embrujadas. El nudo está formado por tres líneas con forma de luna sujetas por un anillo. El número tres poseía para los celtas un valor sagrado. Al igual que el triskel, la figura de origen bretón y céltico formado por tres líneas serpenteantes que se enlazan, el triple nudo de la serie
Embrujadas simboliza el fuego, el agua y la tierra. Pero este nudo es además símbolo de la trinidad del cuerpo, el espíritu y el alma, que muestra el camino de la verdadera iluminación.Asimismo, sirve como alegoría de la triple naturaleza de la mujer como virgen, madre y sabia anciana.
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